Objetivo más que cumplido. En una media marathon nada cómoda para hacer marca (había muchos rompepiernas y un viento a veces molesto), y bien medida, hacer ese 1:43:18 es para mí más que un logro. La meta de hacer una media en 1:45 ya está superada. Ahora viene la marathon de París. Allí el objetivo es sólo terminar, ya sea en 4:15 o 4:30. Me sentiré, igual que hoy, el tío más fuerte del mundo. Y es que al terminar hoy estaba tan pletórico que me sentía con la fuerza de retar al propio Haile Gebreselassie, mi gran ídolo y modelo a seguir en esto del running.
Ha sido un buen día, tanto a nivel individual como de club. Es cierto que la baja de última hora de José Ángel, el hecho de que Andrés no haya competido, o las bajas de Javi o Fco Patricio han provocado que -con casi toda seguridad- no acabemos entre los 5 primeros clubs. Pero está claro que estamos en la brecha, aún con ausencias. Las marcas estratosféricas de Gato con 1:22, de Curro con 1:23 o de Remo con 1:27 nos hacen subir puestos. El TopOcho de nuestro club estuvo por debajo de 1:36, y además el resto nos esforzamos por hacer unos grandes tiempos en nuestro nivel. Merece la pena remarcar el tiempazo de Juan con 1:35, y el super-debut de algunos como Pedro, Miguel Ángel o Juan Ángel, que han comenzado en esta distancia con tiempos cercanos al 1:41. Las superféminas, siempre dándolo todo (primer puesto de Manoli, segundo de Isa y cuarto de Masi en sus categorías), y el verde pistacho en todos los niveles, dando guerra y dejando constancia de nuestro sufrimiento, fuerza y tesón.
La próxima, sin apenas descanso, es Fuentealbilla, 10kms tampoco cómodos, con dos subidas de un kilómetro y también terreno rompepiernas (¡¡qué manía!!). Puestos a batir records personales, creo que no me costará mucho bajar el 48:58 que tengo en Pozo Cañada. Iré para acabar en un tiempo cercano a los 47 minutos. El resto del equipo, si van todos, como creo que irán, seguiremos dando guerra a los clubs asentados de la provincia.
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